Hermes

(Foto: MRMOHOCK/SHUTTERSTOCK)

El ‘envejecimiento en el hogar’ permite a los adultos mayores mantenerse en un ambiente familiar, respetando su independencia y evitando sentirse una carga para sus hijos.
A pesar de que esta modalidad es menos costosa, en Chile no hay apoyo para las familias que optan por ella en vez de un cuidado profesional. Por consiguiente, esta elección impacta negativamente en estas familias.

En la cultura chilena, el cuidado de un adulto mayor se asume como una responsabilidad de su familia cercana, sus hijos, quienes deben agregar a sus deberes las actividades propias del proceso de cuidado. Muchas veces, uno de estos hijos debe abandonar su vida profesional, social y hasta familiar (es decir, sus propios hijos) para asumir las tareas de cuidado.

Para cumplir con el deseo de los adultos mayores para envejecer en su hogar, la familia suele crear un círculo de cuidado informal. En esta estructura, la mayor carga de trabajo la suele recibir el/la cuidador/a más cercano/a al mayor, y además su trabajo es invisibilizado por el resto del grupo familiar. Luego, esta situación genera inadvertidamente estrés emocional, financiero, físico y social en la persona. Se han identificado tres necesidades prioritarias de los cuidadores para mejorar su situación: (1) apoyo social para recibir apoyo o `desconectarse’ de su rol, (2) organización de las tareas derivadas del cuidado y (3) coordinación de los miembros del círculo de cuidado.

Buscando disminuir la carga de trabajo y cubrir las necesidades de los cuidadores, esta memoria presenta Hermes, una herramienta de apoyo al proceso de cuidado informal de adultos mayores. El sistema integra un asistente virtual como nuevo centro de información sin que el cuidador requiera poner atención permanente a los otros participantes. Además, integra funciones de organización de agenda y coordinación de los participantes, además de una plataforma de mensajería. Según el rol del usuario, este puede interactuar con el sistema a través de una aplicación móvil o Whatsapp.

La aplicación móvil, actualmente sólo para Android, refleja la simplicidad de las interacciones que requieren hacer los participantes para lograr su función. El agente virtual, a pesar de necesitar entrenamiento permanente, interpreta de buena manera las intenciones directas de los usuarios. Hermes no presenta tiempos de espera prolongados, equiparables a los de una persona escribiendo, lo que causa tranquilidad al momento de lanzar el producto para un futuro uso real.

Pantalla principal de la aplicación móvil de Hermes

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